Los accidentes de tránsito, incluidos los mortales, están aumentando en varias partes del mundo, por lo tanto, las empresas de transporte deben tomar medidas para priorizar la seguridad de las flotas a través de la formación de conductores y otras iniciativas. Por ejemplo: las empresas que implementan un software de gestión de flotas reducen los costos de accidentes de tránsito en un 15%, de acuerdo al Informe de Tendencias Tecnológicas de Flotas de 2024 por Verizon Connect.
La cultura de capacitación es fundamental en la gestión de flotas para garantizar la seguridad y corregir malos hábitos en los conductores.
1. ADAS: un sistema que apoya a los conductores
El acrónimo ADAS es “Advanced Driver Assistance Systems”, en español significa ”Sistemas Avanzados de Ayuda al Conductor”, son aquellos sistemas que permiten mejorar la seguridad del vehículo, tanto de cara a sus ocupantes como al resto de usuarios de la vía. Dichos sistemas tienen como objetivo facilitar la conducción y ayudar a reducir, significativamente, el número de accidentes de tráfico. Además, se crea una cultura de conducción segura que permite que los administradores de flotas tomen medidas proactivas para mitigar los accidentes en lugar de reaccionar a ellos.
El sistema ADAS se encuentra en las cámaras de cabina con inteligencia artificial que ofrece Tracker GPS, mediante alertas de audio le avisa al conductor sobre: personas que están muy cerca del vehículo, frenados y acelerados bruscos, desvíos del carril, exceso de velocidad, entre otros.
Video Tracker con IA puede:
- Respaldar la seguridad de la flota.
- Monitorear al conductor y su comportamiento en tiempo real.
- Activar alertas de audio instantáneas según sea necesario.
2. Retroalimentación a conductores
La retroalimentación de persona a persona es una herramienta poderosa para que los conductores comprendan los costos de sus acciones para la seguridad de la flota. Las alertas de seguridad a bordo del vehículo son importantes, al igual que las sesiones periódicas de capacitación en grupo, pero cuando se trata de formación de conductores, las sesiones individuales respaldadas con datos pueden ser una forma muy eficaz de cambiar los malos hábitos de conducción.
Al momento de brindar una retroalimentación sobre un comportamiento de conducción inseguro o severo, la capacitación se vuelve mucho más impactante si los gerentes pueden proporcionar datos acerca de las acciones del conductor. Además, esos datos también pueden mostrar cómo un cambio de comportamiento positivo, prioriza la seguridad de la flota y la eficiencia operativa en comparación con los estándares de la industria.
Por ejemplo: si el sistema de monitoreo muestra que un conductor tiende a frenar y acelerar bruscamente, el primer paso es mostrar la evidencia de esos hechos para cambiar ese comportamiento, especialmente si ocurren con frecuencia. El segundo paso es compartir testimonios respaldados por la industria sobre las mejoras que se realizaron al momento de seguir las pautas, en particular, una pregunta testimonial sería: ¿cómo la reducción de las aceleraciones bruscas conduce al ahorro de combustible?
3. Formación continua de conductores de flotas
La formación de conductores es fundamental para cambiar su comportamiento, por ello, se deben crear programas individuales para que cada uno se concentre en su conducta de manejo. Otros componentes de un programa exitoso de capacitación de conductores son:
• Fomentar una cultura de seguridad. Reforzar periódicamente con los conductores los verdaderos costos de una conducción insegura.
• Compartir métricas de conducción segura de alta prioridad. ¿Qué métricas de seguridad son más importantes para su flota? ¿Exceso de velocidad, frenados y acelerados bruscos, falta de uso del cinturón de seguridad? Enfoque sus esfuerzos de capacitación de conductores en esas prioridades.
• Recompensar el buen comportamiento de conducción. La formación de conductores se centra en corregir hábitos de conducción peligrosos e ineficientes, además al ofrecer incentivos y reconocimiento a los choferes de la flota que tienen buenos hábitos, los convertirá en embajadores de la seguridad y brindará a otros conductores recompensas significativas a las que aspirar.
Los datos son fundamentales para identificar áreas de mejora, brindar retroalimentación efectiva, motivar a los conductores a cambiar sus hábitos de conducción y promover una cultura de seguridad en la flota.
Fuente: Verizon Connect